Receta de 🍖 Media pata de cerdo asada. Lo de elegir media en lugar de una entera es porque la parte trasera o sea la parte de la pata que está más cercana al codillo, es más sabrosa que la parte delantera, pero no cabe duda que toda ella sabe bien.
▷ Media pata de cerdo asada 🐖
A esta media pata de cerdo la vamos a acompañar de un Puré de papas (patatas).
Media pata de cerdo de unos 4 o 5 kg máximo, eligiendo la parte trasera
1 litro de agua
400 ml de coñac
Sal gorda marina
Vinagre de vino blanco
En la Categoría de Recetas. En el Apartado de Verduras. Ver Ingredientes y Elaboración.
1. En primer lugar y en el caso, de que no nos vendan la mitad, y tengamos que comprarla entera, lo normal es que a la hora de comprar la pata, pidamos al carnicero que nos la de ya partida a la mitad y con los cortes en la piel ya hechos. La otra mitad, la podemos congelar, tanto entera como troceada.
2. Después, de llegar a casa cogemos la mitad a utilizar, la lavamos y la metemos en un recipiente grande con agua y un buen chorro de vinagre de vino blanco, la dejamos al menos unas 2 horas en esa agua con vinagre. Pasadas las 2 horas la sacamos, la lavamos y dejamos escurrir. El vinagre, además de ablandar la carne, nos vale también, como efecto desinfectante.
3. A continuación y lo siguiente que haremos será, poner a calentar el horno a 200 grados.
4. Luego, elegimos una bandeja, que nos sirva para llevar al horno. Después, de elegida la bandeja, ponemos unos granos de sal gorda marina, esparcida en el fondo.
5. A continuación, colocamos la media pata en la bandeja, encima de la sal que habíamos esparcido, con la parte que tiene la piel más grande, hacia arriba.
6. Después, y ya colocada la media pata en la bandeja, le ponemos unos granos de sal gorda por encima, procurando repartirla en medio de los cortes de la piel.
7. Seguidamente, le ponemos el agua, en la bandeja, el agua es para que a medida que se vaya asando y soltando la grasa, esta no se nos queme.
8. Luego, la regamos, con la mitad del coñac.
9. Seguidamente, metemos la bandeja en el horno y ajustamos la temperatura a unos 180 grados. (el tiempo suele ser de media hora por kg, por lo que para esta media pata que pesa casi los 5 kg, necesitara al menos unas 2 horas y media, mas el tiempo que la deje dorando, que no será más de 10 minutos, todo esto puede variar, dependiendo del tipo de horno que se utilice para el asado, por eso lo mejor es ir controlando su cocción).
10. En todo momento controlar que, la bandeja no se nos quede sin agua, (si es necesario y con mucho cuidado de no quemarnos le incorporamos más).
11. Aunque ese sea el tiempo, que la media pata necesita para estar en su punto, lo que haremos, con mucho cuidado el no quemarnos, es darle la vuelta a la mitad del tiempo, esto lo hacemos para que, las dos partes de la media pata, se guise de igual forma.
12. A continuación, la regamos de nuevo con la otra mitad del coñac.
13. Y después de cocinada por esa parte, volvemos a darle la vuelta para dorarla, pero solo unos 10 minutos, cuando eso ocurra, la sacamos automáticamente del horno (pues si la dejamos dentro, corremos el riesgo de que nos quede demasiado seca).
14. Seguidamente, ponemos la Media pata de cerdo asada en una bandeja y desechamos la grasa que haya soltado el asado. Por lo de las grasas saturadas, el colesterol malo y las calorías.
15. Luego, la dejamos reposar apenas unos segundos y con mucho cuidado comenzamos a trocearla, antes de que se enfríe.
16. La podemos trocear y llevar a la mesa la ración de cada comensal, ya emplatada, poniendo además en cada plato, por sí los comensales lo desean, un par de trocitos de la piel crujiente y acompañada de un, Puré de papas.
17. También, se puede llevar a la mesa entera y trincharla ya en ella, llevando entonces el Puré de papas aparte, para servir, o que se sirvan los propios comensales a su gusto.
18. El resto de la media pata, que quede se puede trocear y guardar por partes:
1) Una parte, en filetitos, e irlos poniendo en un recipiente, que nos sirva para guardar y congelar a la vez, para sacar en cualquier otro momento.
2) Otra parte, se puede trocear en daditos, e irlos poniendo en otro recipiente, que nos sirva para guardar y congelar a la vez, estos daditos nos valdrán para acompañar, cualquier salteado de verduras.
3) El resto, que será ya los trocitos de repelar el hueso, los ponemos en otro recipiente, que nos sirva para guardar y congelar a la vez, estos pequeños trocitos, nos pueden servir para poner en alguna salsa o para prepararnos unos deliciosos bocadillos.
4) Lo que nos queda ya es el hueso, la piel y los restos de grasa, que lo desechamos.
19. Buen provecho.