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Receta de 🥒 Calabacines rellenos de morcilla dulce. Hoy vamos a elaborar, una deliciosa y sabrosa receta de unos calabacines rellenos. Para ello, vamos a utilizar un Relleno de morcilla dulce. Como os prometí aquí os dejo una segunda receta donde vamos a utilizar el sabroso Relleno de morcilla dulce.
Calabacines rellenos de morcilla dulce
Ingredientes: (para 10 comensales)
5 calabacines grandes
Sal gorda marina
Agua
Relleno de morcilla dulce
Preparación del Relleno de morcilla dulce
En la Categoría de Recetas. Ver Ingredientes y Elaboración. En el Apartado de Carnes.
Preparación de los calabacines antes de rellenarlos
1. Primeramente, lavamos los calabacines, los limpiamos y sin pelarlos los partimos a la mitad a lo largo.
2. A continuación, en una cazuela amplia, pondremos a hervir agua con un poco de sal, cuando comience a hervir, introduciremos las mitades de los calabacines, para escalfarlos unos 5 minutos, luego, los sacamos de la cazuela con esmero, para no destrozarlos, los dejamos que se escurran y enfríen.
3. El agua de la cocción la reservamos.
4. Después de que se hayan enfriado, vamos cogiendo las mitades de los calabacines y con mucho cuidado el no romper las pieles, con la ayuda de una cuchara sopera, les vamos quitando la carne de su interior (reservando la misma).
5. Tras haberlos vaciado, los iremos colocando en la fuente o bandeja que vayamos a utilizar para meterlos en el horno.
Preparación de los Calabacines rellenos de morcilla dulce
1. Llegó el momento de rellenar los calabacines, que le habíamos quitado la carne y habíamos depositado en la bandeja.
2. Los vamos rellenando con la ayuda de una cuchara sopera, y con mucho cuidado el no romperlos.
3. Calentamos el horno a unos 200 grados, unos minutos antes de meter los calabacines, luego lo bajamos a 180 grados y los dejamos en el horno unos 20 minutos.
4. Pasado ese tiempo los sacamos del horno, para que no se quemen.
5. Estos calabacines nos valdrán tanto de plato único, como de acompañamiento, así como de entrantes, pero recomiendo, no comerlos muy fríos.
6. Los servimos ya emplatados individualmente, una mitad en cada uno de los platos.
7. Buen provecho.
A modo de nota
El agua y los interiores de los calabacines los reservamos en la nevera, para la elaboración de otra receta.
