Hoy os voy a dejar otro de mis pequeños consejos o truquillo. Este no es otro que la elaboración de Aceite de guindillas. Este aceite se puede utilizar tanto para cocinar, como para aliñar.
Aceite de guindillas
El aceite de guindillas la conseguimos de de la siguiente forma:
Cogemos unas cuantas guindillas frescas, rojas y pequeñas. Las cuales, limpiamos, lavamos y dejamos escurrir muy bien. Después, las introducido en un bote de cristal con tapa. Ya en en el bote, las cubrimos bien con aceite de oliva. Luego, las tapamos y guardamos, dejando que, haya pasado al menos, un mes desde la acción, de haberlas puesto a macerar. Hasta la utilización del aceite, de dicha maceración.
Pasado ese tiempo, el aceite estará listo para su utilización.
No solo, se podrá utilizar el aceite. Ya que, las guindillas, también se podrán utilizar para cualquier receta.
Al estar metidas en aceite. Las guindillas se mantendrán siempre tiernas.
En el transcurso del tiempo de maceración, es aconsejable no destapar el bote.
Si las guindillas son demasiado picantes, hay que tener en cuenta, las medidas de aceite utilizar. A no ser que, os encante el picante, teniendo en cuenta siempre, si se cocina para niños o mayores, o intolerantes al picante.

A modo de nota
Si queréis utilizar el Aceite para aliñar, en lugar de para cocinar. Mejor utilizar aceite oliva virgen extra.