Persistencia
A lo largo de nuestra vida
habrá días buenos
y del mismo modo,
habrá días malos.
Tanto a unos como a los otros
debemos saludarlos.
A los días buenos
los esperamos con ansia para que
estos, nos llenen de esperanza.
A los malos
aunque su recibimiento
lo hagamos con desgana
no obviamos que, también ellos
formaran parte de nuestra vida.
La suma de los días buenos
junto con los días malos
será el resultado final
de nuestra permanencia.
Empero de todo ello
nuestro mayor deseo es que,
la balanza siempre esté a favor
de los días buenos
y no, de los malos.