Granitos en el pico
Expectante estaba el perro
Atento y vigilante
Viendo como el gato
Controlaba a las palomas
Desde hacía ya un rato
Éstas iban y venían
Y del granero
Entraban y salían
Y en sus picos cargaban
Granitos de cebada
Que ellas mismas
Con la ayudas de sus picos
De los sacos se llevaban
Y con esos granitos
Las palomas
A sus pichones alimentaban