La historia de Niqui
Aquella mañana se había levantado antes de lo que era habitual en ella, normalmente Niqui, que era así como se llamaba la niña de mi historia se levantaba a las seis de la mañana, puesto que era de la única forma de llegar a tiempo al colegio.
Ella vivía a diez kilómetros del colegio «El Ermitaño», era así como se llamaba el centro al que Niqui asistía cada día con su hermano Javier y su primito Francisco, las edades de los niños era la misma ocho años, ya que por providencia habían nacido los dos el mismo día, en cambio ella tenía dos más que ellos.
Como ya hemos mencionado anteriormente Niqui se levantó antes de lo normal, aún no habían cantado ni siquiera los gallos que eran los que la despertaban a diario, la razón era que ese era el último día de clase antes de las vacaciones de verano, estaba nerviosa y contenta a la vez, lo primero por la recogida de notas que aunque se había preparado meticulosamente para la realización de los exámenes, no podía dejar de pensar que precisamente en esos días, era cuando más escases de comida acaecía en su casa, y ya se sabe que cuando no hay una buena alimentación, no se rinde igual. Sin dejar de mencionar que la mayoría de los días se iban al colegio sin tomar nada para desayunar. Lo de contenta era que con la llegada de las vacaciones, se irían a un campamento de verano donde se lo pasarían bien, pero que para Niqui, Javier y Francisco eran días de esperanza, pues además de las actividades diarias que eran muy importantes y este año estaban dedicadas a ¿Cómo comer sano y estar saludable?, era que durante el verano iban a comer como el resto de los/as demás niños/as. Desayunarían, a diario, a media mañana, al mediodía, en la merienda y no se irían ninguna noche sin cenar a la cama, como ocurría la mayoría de las noches el resto del año.
En su casa con la llegada de la crisis, sus padres se habían quedado sin trabajo, por más que buscaban no encontraban nada, sólo les quedaba una mísera ayuda que les daba el estado, pero que evidentemente no les daba pata todos los gastos de la casa y la alimentación de los cinco. Si han oído bien lo de los cinco, puesto que su primo Francisco vivía con ellos desde que hace un año. Ya que sus padres murieron en un accidente de tráfico, por culpa de un conductor irresponsable que conducía en sentido contrario e iba embriagado.
Niqui a pesar de su corta edad era una niña muy despierta para su edad, por lo que era muy responsable en sus actos, no era necesario indicarle lo que tenía o no que hacer pues siempre lo sabía. Prácticamente era ella la que se encargaba de Javier y Francisco en cuanto a la educación escolar, siempre estaba pendiente de que estudiaran y realizaran sus tareas diarias antes de irse a la cama. En el fondo eso a sus padres los ponía un poco triste, puesto que veían que la niña se hacía mayor demasiado deprisa y no disfrutaba de su niñez como el resto de las niñas de su edad.
Esa mañana camino del colegio pensaba, que ironía ellos que estaban pasando tantas necesidades y escasez de alimentos iban a asistir a un campamento donde asistirían a un taller en el cual se les iba a enseñar a ¿Cómo comer sano y estar saludable?, cuando en su casa lo importante era luchar por estar sanos sin comer saludable.
